...desde una esquina.
Me gustan las historias que no tienen finalesy las hojas secas que huelen al otoño medieval.
También disfruto triunfante la fría y dura indiferencia
de todos aquellos rostros que decoran el ayer.
Me atrae justo aquel rostro que se me antoja pensante
y adoro los detallitos de las fotos más borrosas.
Río al mirar esas gotas, que necias buscan la muerte.
Y canto como una tonta, cada día al amanecer.
Feliz, me recuerdo niña y que me embutía en faldas
y amaba las flores tibias que reían entre ellas.
Danzaba sobre la tiza del avioncito del suelo
Y suspiraba extasiada de amor que comía con miel.
. . .